Echa un vistazo en cualquier salón de clases de primaria: dos o más de los niños tendrán caries dentales antes de entrar a la secundaria. Las caries dentales representan la enfermedad crónica #1 en niños dentro de Estados Unidos; 5 veces más común que el asma y 4 veces más común que la obesidad. Aún cuando las caries dentales son tanto prevenibles como tratables, casi una cuarta parte de los niños pequeños nunca recibirán una tapadura dental en sus dientes primarios.
Febrero es el Mes de Salud Dental Infantil (Children’s Dental Health Month), un momento para hacer conciencia sobre la crisis de la salud oral que lleva a consecuencias de por vida a niños, afectando su habla, habilidad de comer, su auto estima, sueño, desempeño académico y asistencia, desarrollo de dientes permanentes, e incluso puede ser fatal. Los niños hispanos y afroamericanos padecen más que otros, sufriendo rangos desproporcionados en caries dentales más severas y no tratadas.
Los padres de familia juegan un papel extremadamente importante en asegurarse de que sus hijos lleven una rutina de cuidado dental apropiada. Sin embargo, los índices en caries dentales y enfermedades de las encías son indicativos de la necesidad de un cambio en la forma en que los hogares abordan la salud oral.
Existe un vacío entre la ideología y la práctica del cuidado dental. Aún cuando es aceptado por muchas personas que el cuidado dental es importante, una Encuesta Gallop del 2013 reportó que solamente un 65% de los adultos visitaron su dentista para su cita anual, cifra que permanece igual al reporte anterior del 2008. Similarmente, un tercio de los adultos admiten que no se lavan los dientes dos veces al día y los índices de uso de hilo dental son todavía más abismales.
La gran noticia es que las caries son prevenibles. Pero para que los niños permanezcan sanos, los adultos deben establecer y practicar una buena higiene oral.
Aquí hay unos consejos fáciles para ayudar a las familias a que mejoren sus rutinas diarias dentales:
- Que cada miembro de la familia escoja su cepillo dental; el que sea manual o eléctrico no importa mucho siempre y cuando se cepillen los dientes durante dos minutos, dos veces al día.
- Usa hilo dental entre cada diente para limpiar las áreas que los cepillos no alcanzan por sí solos. Tanto los niños como los niños como los adultos deben de usar hilo dental diariamente para remover partículas alrededor de los dientes y debajo de las encías.
- Ayuda a los niños más pequeños a lavar sus dientes y usar hilo dental ya que los pequeños no cuentan con la destreza manual presente en niños más grandes y en los adultos.
- Los bebés y menores de muy corta edad también necesitan cuidado. Limpia las encías de los bebés después de alimentarlos y utiliza un cepillo muy suave para limpiar sus dientes de leche.
- Lleva contigo artículos para el cuidado dental durante tu viaje de semana santa. Aún cuando los horarios para dormir y los desayunos son más flexibles durante las vacaciones, es importante el asegurarse de que los niños continúen dándole cuidado a sus dientes.
- Visita tu dentista cada seis meses para un examen regular, rayos x y limpieza dental. Un niño debe empezar sus visitas al dentista cerca del año de edad.