El comer bocadillos o botanas entre comidas es una forma dietética eficiente para combatir el hambre. Desafortunadamente, el comer bocadillos entre comidas puede causar problemas imprevistos con tu salud bucal, tales como la descomposición dental y la sensibilidad. Conoce sobre el tema de los bocadillos y cuáles son mejores o peores para tus dientes, así como formas de combatir las caries dentales.
Cómo Los Bocadillos Pueden Arruinar Los Dientes
El comer bocadillos no es el problema en sí, sino lo que escoges para comer. La acidez de un alimento contribuye a una mayor formación de caries. La acidez también es corrosiva para el esmalte dental y a lo largo del tiempo el consumo de alimentos y bebidas altas en acidez causarán erosión del esmalte, así como el desarrollo de sensibilidad o una descomposición dental.
Bocadillos azucarados o altos en almidón contribuyen a la descomposición dental. La bacteria que causa caries se alimenta del azúcar emitida durante el proceso de descomposición de los alimentos que ingieres. Aún cuando la bacteria en sí no causa caries dentales, el ácido producido como un subproducto de la bacteria erosiona el esmalte dental. Condiciones favorables en la boca formarán un lugar ideal para que la bacteria prospere y aumente dentro de la boca, incrementando el riesgo del desarrollo de caries. Entre más tiempo duren asentadas en las superficies de los dientes las azúcares y partículas alimenticias, mayor será el riesgo de la descomposición dental.
Sí Importa El Tipo De Bocadillos Que Se Ingieran
Algunos bocadillos son más saludables para tus dientes y tu cuerpo que otros. Algunos tipos de alimentos pueden balancear el pH de la boca, así como otros pueden disrumpir este balance. Recuerda que el balance es importante para tener una boca sana. Comidas y bebidas altas en ácido reducen el pH de la boca. Entre ellas se encuentran las bebidas gaseosas, el café, el pan, la carne procesada, el azucar y azucar artificial, la pasta y el alcohol. Aún cuando no es necesariamente malo el disfrutar de estos alimentos en casos especiales, el consumo frecuente incrementa el riesgo de una descomposición dental.
Entre los niveles altos de pH, conocidos como alcalinos, se encuentran la mayoría de las frutas y verduras frescas. Y en el espectro más alto de los alcalinos se encuentran el camote, las uvas, kiwis, frijoles, pepinos, espárragos, coliflor, mandarinas, papaya, cebolla y brócoli. Los alimentos crujientes como el apio, la manzana y la zanahoria son saludables para la boca porque tienen un efecto natural de tallado que disrumpe la placa dental. También, alimentos como el queso, champiñones y el té verde contienen propiedades que combaten las caries dentales.
El agua natural tiene un pH neutro. El agua es la bebida más sana para tus dientes. Muchos pacientes preguntan sobre la salud del agua con gas, ya que no contiene aditivos pero sí contiene carbonatación. El agua con gas es ácida ya que la carbonatación se incita por el dióxido de carbono. En este caso, una reacción química se sucede en tu boca y convierte el dióxido de carbono en ácido carbónico, el cual erosiona el esmalte dental.
Previene Las Caries
Trata de no cepillar tus dientes inmediatamente después de comer bocadillos, y en particular un bocadillo ácido ya que arriesgas el dañar el esmalte dental, el cual ya se encuentra en un estado vulnerable. Si te es posible, come o bebe tu bocadillo en una sola sesión u ocasión, y también pospón la ingestión de bebidas ácidas hasta que realices una comida completa, momento en el que el flujo de la saliva es más alto.
Cuando cepilles tus dientes, escoge una pasta dental que proteja las caries. El uso de hilo dental es muy importante para limpiar aquellas superficies de los dientes que el cepillo dental no puede alcanzar. Por último, visita a tu dentista dos veces por año para un examen y limpieza profesional.
En general, el ingerir bocadillos no es un problema si tomas los pasos necesarios para proteger tu salud oral. Mantén en mente qué bocadillos promueven una mejor salud dental y cuáles pueden afectar tus dientes de forma negativa. Además, opta por un buen balance: bocadillos salados y azucarados no presentan un problema si son ingeridos con moderación, siempre y cuando mantengas al tanto tu cuidado dental.